Con la conchudez que te da el no tener nada que perder, estamos participando en "20 blogs peruanos", un concurso que premia a los mejores blogs en distintos rubros. Recogebolas va en la categoría "Deportes". Para votar, solo dale click al enlace de la derecha.
Es al toque, no seas pendejo.

domingo, 17 de julio de 2011

¡La tenés adentro, Argentina!

Con buena onda, porque consideramos que hicieron un gran partido y, quizás, hasta merecieron el triunfo por lo exhibido en la cancha durante los 120 minutos de juego. Como Colombia ante Perú, los equipos que plantearon el juego de una manera más táctica que ofensiva se alzaron con el triunfo. Y por eso, quizás, es que tenemos una semifinal entre los equipos que no eran favoritos para ganar sus llaves —por más irónico que suene que Uruguay, este Uruguay, no era favorito en un partido de la Copa—. Perú y Uruguay se verán las caras de nuevo en esta Copa América.

Messi es de otro mundo, porque no son muchos los terrestres que pueden ponerse un equipo encima tantas veces y seguir creando fantasías inimaginables para sus compañeros. Otra cosa es que la puntería de los delanteros, volantes y hasta defensas que Batista puso en la cancha haya estado completamente errada. No es culpa del técnico eso último, no da para pedir a otro entrenador ni mucho menos al amateur e incapaz Maradona. Me parece que el DT argentino encontró un estilo sobre los dos últimos partidos de la competición. Creo que encontró el balance al medio del campo y halló hombres interesantes arriba. Sin embargo, la defensa sigue siendo el ítem a trabajar en sus entrenamientos, pues no es posible que pierdan todas las pelotas que van por arriba y se regalen tan fácil en el mano a mano. No es el fin del mundo y eso es lo que deben entender los argentinos. Es humillante salir de su propia Copa América tan temprano, sí, pero no es humillante ser eliminado por un equipo más sólido y ordenado —mejor, al fin y al cabo— como el uruguayo.

De Uruguay qué hay que decir… es el país que mejor tiene los huevos puestos de este lado del mundo. Aguantó la maquinaria ofensiva argentina con un hombre menos —y qué hombre de menos, el “Ruso” Pérez, el Gattuso latinoamericano (pero que, valgan verdades, debió irse expulsado incluso antes del momento en el que realmente vio la roja)— durante más de una hora de juego, hasta que Mascherano se fue de la misma manera. Luego está Forlán. Forlán no tiene que meter goles para figurar, le basta con poner esos pases precisos e inspirar aquel respeto. Como para taparle la boca a Zaira Nara y a los oportunistas que jodían en el estadio.  Suárez quizás esté algo en deuda, pues le falta ese toque final. Solo eso. Y Muslera… ¡qué tal arquero, por favor! La atajada doble en el tiro libre de Tévez sobre el final del segundo tiempo reglamentario es la atajada de la Copa. Determinante. Seguro. El tipo de arquero que un equipo como Uruguay necesita. Probablemente, incluso superior que la mejor versión que vi de Carini, quizás el último arquero uruguayo que tuviera sus momentos de gloria.

No es novedad que Uruguay esté en semifinales de la Copa, es una consecuencia lógica a su juego y a sus antecedentes. Ahora, si nos guiamos por juego y antecedentes, tampoco es novedad que Argentina esté eliminada tempranamente. Impresiona, en todo caso, por la localía, el tiempo de preparación, la clase de jugadores, las decenas de goles desperdiciados. Ya en los penales no hubo nada que hacer. Tévez tomó mucha carrera y Muslera adivinó el lugar de la ejecución. Vino Cáceres y, con mucha clase, los mandó afuera en su propia cancha, en su propia cara, en su propia casa. En su propia Copa. Nunca tan cierto como hoy, por el esfuerzo, por el favoritismo, por la calidad y la cantidad, por la historia, por los comentaristas de Fox y quizás porque es lo que el buen Diego estará pensando en este preciso momento al mirar la selección de Batista y con el perdón de los aludidos, la tenés adentro, Argentina.

1 comentario: